Antes de adentrarnos en este complejo mundo de las impresoras, vamos a exponer algunos de los conceptos básicos sobre las mismas.VelocidadLa velocidad de una impresora se suele medir con dos parámetros:ppm: páginas por minuto que es capaz de imprimir;cps: caracteres (letras) por segundo que es capaz de imprimir.Actualmente se usa casi exclusivamente el valor de ppm, mientras que el de cps se reserva para las pocas impresoras matriciales que aún se fabrican. De cualquier modo, los fabricantes siempre calculan ambos parámetros de forma totalmente engañosa; por ejemplo, cuando se dice que una impresora de tinta llega a 7 páginas por minuto no se nos advierte de que son páginas con como mucho un 5% de superficie impresa, en la calidad más baja, sin gráficos y descontando el tiempo de cálculo del ordenador.Y aún así resulta prácticamente imposible conseguir dicha cifra; en realidad, rara vez se consiguen más de 3 ppm de texto con una impresora de tinta, si bien con una láser es más fácil acercarse a las cifras teóricas que indica el fabricante.
Se habla generalmente de ppp, puntos por pulgada (cuadrada) que imprime una impresora. Así, cuando hablamos de una impresora con resolución de "600x300 ppp" nos estamos refiriendo a que en cada línea horizontal de una pulgada de largo (2,54 cm) puede situar 600 puntos individuales, mientras que en vertical llega hasta los 300 puntos. Si sólo aparece una cifra ("600 ppp", por ejemplo) suele significar que la resolución horizontal es igual que la vertical.De cualquier modo, no todo es "tirar puntos" sobre el papel. Dos impresoras de la misma resolución teórica pueden dar resultados muy dispares, ya que también influye el tamaño de esos puntos y la precisión a la hora de colocarlos sobre el papel. De nada sirve colocar 360.000 puntos en una pulgada cuadrada si están puestos unos sobre otros emborronando la imagen.
El buffer de memoria
en el extremo del cable que se conecta al ordenador, con 25 pines en 2 hileras, mientras que en el extremo que se conecta a la impresora suele tener 36 pines planos y unas abrazaderas
El cable para conectar ambos dispositivos se suele denominar cable paralelo Centronics; para bidireccionalidad se debe usar cables específicos, más avanzados y de mayor calidad.
Si queremos clasificar los diversos tipos de impresoras que existen, el método más lógico es hacerlo atendiendo a su tecnología de impresión, es decir, al método que emplean para imprimir en el papel, e incluir en dicha clasificación como casos particulares otras consideraciones como el uso de color, su velocidad, etc. Eso nos lleva a los tres tipos clásicos: matriciales, de tinta y láser.
Las impresoras de agujas, muchas veces denominadas simplemente matriciales, tienen una matriz de pequeñas agujas que impactan en el papel formando la imagen deseada; cuantas más agujas posea el cabezal de impresión mayor será la resolución, que suele estar entre 150 y 300 ppp, siendo casi imposible superar esta última cifra.Aunque la resolución no sea muy alta es posible obtener gráficos de cierta calidad, si bien en blanco y negro, no en color. El uso de color implica la utilización de varias cintas o cintas más anchas, además de ser casi imposible conseguir una gama realista de colores, más allá de los más básicos.Al ser impresoras de impacto pueden obtener copias múltiples, lo que las hace especialmente útiles en oficinas o comercios para la realización de listados, facturas, albaranes y demás documentos. Su velocidad en texto es de las más elevadas, aunque a costa de producir un ruido ciertamente elevado, que en ocasiones llega a ser molesto. Resulta muy común encontrarlas con alimentadores para papel continuo, lo que sólo ocurre con algunas impresoras de tinta de precio elevado.En general, las impresoras matriciales de agujas se posicionan como impresoras de precio reducido, calidad media-baja, escaso mantenimiento y alta capacidad de impresión. Entre los pocos fabricantes que quedan de estas impresoras destaca Epson, con un enorme catálogo con opciones y precios para todos los gustos.
Impresoras matriciales
Se puede decir que este es el escalón básico en la oferta de impresoras; muchos os preguntaréis, ¿quién puede querer una impresora de agujas? La respuesta es: mucha gente. Para empezar, son imprescindibles en trabajos donde haya que imprimir sobre papel de copia, es decir, con más de una hoja; esto engloba todo tipo de oficinas y centros, públicos o privados, que empleen ese tipo de papel. También los programadores saben apreciar su valor, ya que para imprimir un gran listado de un programa no vamos a utilizar una máquina láser o de inyección.Su funcionamiento es simple, un cabezal dotado de una serie de diminutas agujas recibe impulsos que hacen golpear dichas agujas sobre el papel, que a su vez se desplaza por un rodillo sólido. Los modelos más frecuentes son los de 9 y 24 agujas, haciendo referencia al número que de este componente se dota al cabezal; este parámetro también se utiliza para medir su calidad de impresión, lógicamente a mayor número de agujas, mayor nitidez se obtendrá en la impresión.Como iremos viendo, en realidad no puede hablarse de inconvenientes de un tipo u otro de impresoras, simplemente cada uno tiene una orientación (a un tipo de trabajo) diferente de otro. En el caso de las matriciales, resulta evidente que no sirven para imprimir gráficos, y que su funcionamiento no es precisamente silencioso.
Impresoras de inyección
Sin duda el segmento de más éxito en el campo de las impresoras es el de la inyección o chorro de tinta; su funcionamiento también se basa en un cabezal, en este caso inyector, dotado de una serie de boquillas que expulsan la tinta según los impulsos recibidos. Aunque al principio únicamente se podía imprimir en blanco y negro, el color se popularizó rápidamente, y se puede decir que ahora la inmensa mayoría de usuarios domésticos adquiere una impresora de inyección en color junto con su PC.Aquí el parámetro de calidad lo da la resolución de la imagen impresa, expresada en puntos por pulgada; aunque con 300 ppp basta para imprimir texto, para fotografías es recomendable al menos 600 ppp. Dada su relación precio/calidad, son las impresoras más utilizadas para trabajos domésticos y semi-profesionales.Como inconveniente se puede citar lo delicado de su mecánica y también su mantenimiento, ya que los cartuchos no suelen ser baratos.
Impresoras láser
Aunque el coste de una láser ya no tira para atrás como en otros tiempos, lo cierto es que siguen orientadas al ámbito profesional. En estas máquinas, un tambor, abreviado OPC (Optical Photo Conductor), o dicho comúnmente "fotoconductor", cargado de electricidad estática es recorrido por un pequeño rayo láser, cuyo haz actúa invirtiendo la carga en el tambor y atrayendo hacia éste el tóner (la "tinta" de las impresoras láser).Este tóner se "pega" al papel por la acción de la corona o rodillo de transferencia, que invierte la polaridad del OPC atrayendo hacia sí las partículas de tóner. Como entre la corona de transferencia y el OPC está el papel, es en este en donde se queda el tóner, osea, lo que al fin y al cabo vamos a imprimir, ya sea texto o gráfico. Ahora bien, esa imagen no está "fijada" en el papel, de hecho, si le pasamos un dedo por encima antes de pasar por el último rodillo (fusor), el tóner "se corre". Gracias la acción del fusor, que son dos rodillos, uno de calor y otro de presión, ya sí se fija definitivamente la imagen.Aquí se tiene en cuenta tanto la resolución, también expresada en ppp (lo mínimo aconsejable es 600 ppp) como la rapidez de impresión dada en páginas por minuto.¿Inconvenientes? Son máquinas todavía caras, y aunque los consumibles no se cambian con la frecuencia que en las impresoras de inyección, cuando hay que hacerlo el bolsillo puede resentirse. Pero su rapidez y calidad de impresión las hacen destacar sobre el resto.Detalles comunes: memoriaPrácticamente todas las impresoras, independientemente de la tecnología empleada, incluyen una memoria RAM. En las matriciales puede ser de unos pocos bytes (8 Kb, 16 Kb, etc.), y no mucho más en las de inyección. Por el contrario, en las láser sí que es imprescindible una buena cantidad de memoria, que no suele bajar de 512 Kb, aunque la verdad es que lo mínimo admisible debe ser, al menos, 1 Mega.
Impresoras e impresión
Función
La evaluación de sus necesidades organizacionales y cómo una impresora sirve esas necesidades en un criterio esencial para determinar el tipo correcto de impresora para su ambiente. La pregunta más importante es "¿Qué necesitamos imprimir?." Puesto que hay impresoras especializadas para texto, imágenes o cualquier variación en medio, debe estar seguro de que adquiere la herramienta adecuada para sus propósitos.
Recíprocamente, las impresoras láser o de inyección de tinta son adecuadas para la impresión de borradores o documentos de distribución interna (tales impresoras con altos volúmenes de impresión se llaman impresoras de grupo de trabajo). Determinar las necesidades del usuario común permite a los administradores determinar la impresora correcta para el trabajo.Otros factores a considerar son funcionalidades tales como duplexing — la habilidad de imprimir en ambos lados de una hoja de papel. Tradicionalmente, las impresoras solamente imprimen en un lado de la página (llamado impresión simplex). La mayoría de los modelos más económicos no tienen la funcionalidad de dúplex por defecto (sin embargo, puede que tengan un método dúplex manual que requiere que el usuario voltee la página). Algunos modelos ofrecen hardware que se puede añadir para permitir esta funcionalidad; estos complementos de hardware pueden incrementar los costos considerablemente. Sin embargo, la impresión en dúplex con el tiempo puede reducir los costos considerablemente, al reducir la cantidad de papel utilizado para imprimir documentos, y por ende, reduciendo los costos de consumibles — principalmente papel.Otro factor a considerar es el tamaño del papel.
La mayoría de las impresoras son capaces de manejar los tamaños de papel más comunes:
carta — (8 1/2" x 11")
A4 — (210mm x 297mm)
JIS B5 — (182mm x 257mm)
legal — (8 1/2" x 14")
Si ciertos departamentos (tales como mercadeo o diseño) tienen necesidades especializadas como la creación de posters o banners, existen impresoras de formato grande que son capaces de utilizar tamaños de papel A3 (297mm x 420mm) o tabloide (11" x 17"). Además, hay impresoras capaces de tamaños aún mayores, aunque estas se utilizan para propósitos especiales, tales como la impresión de huellas digitales.Adicionalmente, durante la evaluación también se deben considerar funcionalidades más avanzadas,tales como módulos de redes para trabajo en grupo e impresión remota.
FUNCIONAMIENTO DE LAS IMPRESORAS LASER
La impresión láser se basa enteramente en la interacción electrostática, el mismo fenómeno que produce que un plástico atraiga trozos de papel tras ser frotado con una prenda de fibra.
Impresora láser
Para comprender la impresión electrostática, basta saber que las cargas eléctricas pueden ser positivas o negativas, y que las cargas de signo opuesto se atraen, mientras que las cargas de igual signo se repelen.En primer lugar, se carga negativamente toda la superficie de un tambor fotosensible, del tamaño de una hoja. Acto seguido, se hace avanzar el tambor línea a línea, y un láser recorre horizontalmente cada línea, ayudado por un espejo giratorio (en otras palabras, se produce un proceso de barrido). El láser incide en los puntos donde la tinta se deberá fijar, invirtiendo la carga (que ahora será positiva). El láser se desconecta en los lugares donde no deberá aparecer tinta (quedando con carga negativa). Por tanto, tras recorrer todo el tambor, solo habrá cargas positivas en los puntos donde deberá depositarse tinta, mientras que el resto (lo que constituirá el fondo blanco del papel) queda cargado negativamente. En otras palabras, se ha conseguido crear una imagen electrostática de la hoja a imprimir, mediante cargas positivas sobre un fondo de cargas negativas.
Puntos cargados positivamenteLos puntos cargados positivamente en el tambor atraen partículas de tóner (material electronegativo mezclado con un pigmento que lo dota de color). Por tanto, la imagen final queda "dibujada" sobre el tambor por medio de puntos negros de tóner.El papel a imprimir se carga positivamente en su totalidad. Por tanto, al hacerlo pasar por el tambor, atraerá a las partículas de tóner (que tienen carga negativa), y la imagen quedará finalmente formada sobre papel. Finalmente, el tóner adherido al papel se funde mediante la aplicación de calor, haciendo que quede totalmente fijado al papel. Se consigue así imprimir una página en una sola pasada, al contrario que en las impresoras de inyección de tinta, donde la página se imprime línea a línea. Antes de imprimir una nueva página, se realiza un borrado electrostático del tambor, dejándolo preparado para un nuevo ciclo.
Impresoras con diodos emisores de luzExiste otra variante de las impresoras láser en las que no es necesario un proceso de barrido. En lugar de un láser y un sistema de espejos se dispone de una hilera de diodos emisores de luz (Láser-LED). Por ejemplo, en una impresora de 300 ppp, habrá una hilera de LED cubriendo una línea completa del papel, a razón de 300 LED por pulgada. Sólo se encienden, para cada línea, aquellos diodos que corresponden a puntos donde deberá aplicarse tóner. Este proceso se repite línea a línea hasta procesar el tambor completo. Se produce el mismo efecto que con un barrido láser, pero de forma más rápida.